1 - El equipo de infusión en alimentación enteral por sonda en pacientes intubados debe cambiarse cada:
12 horas.
6 horas.
24 horas.
48 horas.
2 - La contención mecánica no debe superar:
Las primeras 24 horas.
Las primeras 48 horas.
Los 3-5 días.
Los 5-6 días.
3 - La llamada “sábana fantasma” se utiliza para:
Sujeción de los miembros inferiores.
Fijar las rodillas a la cama.
Evitar que el paciente se quite el pañal.
Mantener el tronco erguido.
4 - Señala cuál de las siguientes, es una consecuencia negativa de efecto físico del uso de la contención mecánica:
Apatía.
Depresión.
Agresividad.
Disminución del apetito.
5 - La fragilidad y destrucción de las uñas por procesos tóxicos e infecciosos se conoce como:
Onicosis.
Panadizo.
Onicomicosis.
Onicocriptosis.
6 - A la hora del aseo del paciente, el auxiliar de enfermería debe observar su piel. La infección aguda de uno o más folículos pilosos se denomina:
Foliculitis.
Forúnculo.
Herpes simple.
Tiña del pie.
7 - La aparición simultánea de varias máculas se conoce como:
Pápulas.
Pústulas.
Exantema.
Equimosis.
8 - La movilización realizada por el propio paciente bajo la supervisión de un profesional, se denomina:
Movilización Activa.
Movilización Pasiva.
Movilización Interna.
Movilización Personal.
9 - Los pasos a seguir en el modelo de inicio de la actividad de pacientes que han estado largos periodos de tiempo encamados son:
Movilización en cama, bipedestación, sedestación, transferencias, deambulación, ayudas técnicas y mantenimiento.
Movilización en cama, transferencias, ayudas técnicas, mantenimiento, deambulación, sedestación y bipedestación.
Movilización en cama, sedestación, bipedestación, transferencias, deambulación, ayudas técnicas y mantenimiento.
Movilización en cama, sedestación, bipedestación, transferencia, ayudas técnicas deambulación y mantenimiento.
10 - El plan de cuidados del síndrome de inmovilidad debe ajustarse a las características particulares de cada paciente y por ello es imprescindible realizar:
Una correcta valoración del estado del anciano.
Unos objetivos globales de actuación, independientes a su valoración.
Un plan de ayuda a la familia.
Un programa curativo y no rehabilitador ni preventivo.